Con el fin de mejorar la seguridad, la eficiencia energética, la comodidad o la accesibilidad, cada vez más Comunidades de Propietarios optan por la domótica. Nos estamos refiriendo a sistemas que automatizan las diferentes instalaciones de un edificio y pueden ser programados para realizar tareas de forma autónoma o a través de una App móvil.
Si bien es cierto que la integración de la tecnología IoT en un edificio parece solo tener ventajas, debemos ser conscientes de que también puede significar una posible vulnerabilidad en las Comunidades de Propietarios que apuesten por ella.
Los ciberataques han aumentado en los últimos años en más de un 150% en España, y muchos de ellos son dirigidos a la tecnología domótica presente en hogares y Comunidades de Propietarios. Al tratarse de sistemas automatizados conectados a Internet, son vulnerables a los ataques informáticos realizados por ciberdelincuentes.
¿Qué tareas puede realizar la domótica en una Comunidad de Propietarios?
Siempre dependiendo de los dispositivos y sistemas instalados en la comunidad, la domótica puede encargarse de tareas como:
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Control de iluminación: permitir el encendido y apagado automático de luces en zonas comunes, control de la intensidad, según la hora del día o la presencia de personas.
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Gestión de climatización: control de la temperatura y la humedad en las instalaciones, adaptando el sistema a las condiciones climáticas y al uso de las instalaciones.
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Control de accesos: mediante sistemas de identificación y verificación de identidad.
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Monitorización y seguridad: instalación de cámaras de vigilancia, sensores de humo, alarmas y otros sistemas de seguridad para detectar intrusos, incendios o fugas de agua.
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Automatización de tareas: como la limpieza de áreas comunes, el riego de jardines o el mantenimiento de piscinas.
Riesgos y vulnerabilidades de la domótica en una Comunidad de Propietarios.
A pesar de todas las ventajas que ofrece la domótica en Comunidades de Propietarios, debemos tener en cuenta que las nuevas tecnologías también implican nuevos riesgos y vulnerabilidades en las Comunidades de Propietarios.
La conexión de dispositivos y sistemas a Internet y la falta de actualizaciones o mantenimiento de los dispositivos y sistemas de domótica pueden ser aprovechadas por la ciberdelincuencia. A veces son pequeñas gamberradas con ánimo de mala diversión, pero que incurren en gastos.
Además, la monitorización de áreas comunes a través de cámaras de vigilancia puede suponer un riesgo para la privacidad de los residentes, especialmente si no se establecen medidas adecuadas para proteger la información capturada. Incluso puede suponer una responsabilidad civil o penal de la comunidad si afecta a la Ley de Protección de Datos.
Cómo minimizar los riesgos de la domótica en una Comunidad de Propietarios.
Para minimizar estas posibles vulnerabilidades, es importante que la comunidad implemente medidas de seguridad y privacidad adecuadas, así como que mantenga los dispositivos y sistemas actualizados y en buen estado de funcionamiento. Además, es necesario ofrecer una adecuada formación y soporte a los residentes, para que puedan manejar correctamente los dispositivos y sistemas de domótica.
Por lo tanto, toda Comunidad de Propietarios debe contar con el asesoramiento de una Empresa de Seguridad Homologada, que se encargue de proteger los sistemas tecnológicos conectados a la red mediante protocolos de seguridad y del tratamiento de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad. También es muy importante que cuente con productos aseguradores específicamente destinados a la ciberseguridad, como por ejemplo los seguros de ciberriesgo.
