Proteger las comunidades de propietarios de la entrada de intrusos es una prioridad para los vecinos y administradores de fincas, que nunca debe de ir reñida con garantizar que los propietarios se puedan mover cómodamente por las distintas zonas comunes.
Contar con sistemas de control de accesos facilitará que los propietarios y empleados puedan acceder, sin utilizar una gran cantidad de llaves o depender de otras personas, a las distintas zonas de la comunidad como la entrada de garajes, portal, trasteros, pistas de pádel o zonas comunes, evitando además que accedan intrusos.
Una de las principales ventajas de contar con un sistema de Control de Accesos es que los dispositivos para el control de accesos pueden estar personalizados para cada uno de los usuarios con autorización, pudiéndose administrar permisos diferentes para cada uno.
Otra ventaja es que los dispositivos para el control de accesos podrán darse de baja de manera remota, de modo que, si un propietario, inquilino o empleado pierde su dispositivo, sufre un robo de este o abandona la comunidad de forma definitiva, su dispositivo quedará inutilizado, sin que esto afecte al resto del sistema.
Así, la Comunidad de Propietarios podrá llevar un control de cuántos dispositivos están activos en cada momento y quiénes son sus propietarios.
Además, en caso de que se produjera un fallo en el sistema o en alguno de los dispositivos, se podrá dar acceso remoto a los usuarios autorizados desde el Centro Operativo de Servicios.
Tipos de dispositivos para el control de accesos:
Dependiendo del espacio que queramos securizar y del uso que vayamos a hacer de este espacio o las preferencias de los usuarios, podremos utilizar distintos tipos de dispositivos para el control de accesos:
Mandos para el control de accesos:
Este tipo de dispositivos se suelen utilizar en garajes de Comunidades de Propietarios, y presentan una serie de ventajas comparativas frente a otras formas de abrir la puerta del garaje como las llaves magnéticas, que no están personalizadas de modo que una misma llave podrá abrir varias puertas de garaje, o los mandos convencionales cuyo código es relativamente fácil de capturar y descifrar.
Los mandos para el control de accesos son dispositivos personalizados, muy difíciles de copiar y que permitirán llevar un registro de con qué dispositivo se ha realizado cada acceso.
Dispositivos de proximidad para el control de accesos:
Estos dispositivos activan el automatismo que abre la puerta cuando el usuario los aproxima al lector entre 5 y 10 cm, evitando que haya fricción y los dispositivos se desgasten, prolongando su vida útil. Estos dispositivos pueden ser:
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Llaveros TAG: Son dispositivos de pequeño tamaño que podrán llevarse junto a las llaves de casa. Son altamente resistentes frente a desgaste o ruptura.
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Tarjetas de proximidad: De tamaño estándar que permite llevarlas en la cartera. No será necesario sacarlas de la cartera para ser detectadas por el lector.
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Pulseras: De silicona, estos dispositivos se pueden mojar y sumergir por lo que son perfectos para zonas deportivas como gimnasios o piscinas.
Cada uno de estos dispositivos están personalizados con un código distinto, por lo que se podrán conceder a los usuarios permisos personalizados a ciertas zonas, por ejemplo, permitiendo sólo al presidente acceso a la sala del grabador o concediendo a un empleado acceso a la sala de calderas, pero denegándole el acceso a las pistas de pádel.
Tarjetas con tecnología dual:
Estas tarjetas se utilizan de forma distinta para acceder con tu vehículo o para entrar de forma peatonal. Para entrar con el vehículo la tarjeta se colocará en la luna del coche mediante un soporte, y un lector detectará esta tarjeta hasta a 8 metros de distancia.
Para acceder peatonalmente, la tarjeta se utilizará de la misma manera que los dispositivos de proximidad para el control de accesos.
Sistemas de lectura de matrícula:
Una cámara con analítica de video reconocerá las matrículas de los coches que traten de acceder al garaje, y el sistema de control de accesos las cotejará con el sistema para dar acceso sólo a vehículos autorizados.
Este sistema de Control de Accesos es muy cómodo ya que no será necesario presentar ningún dispositivo para entrar, sin embargo, si algún usuario de garaje cambia frecuentemente de vehículo, no podrá entrar, por lo que si una Comunidad de Propietarios opta por este sistema conviene que lo combine con otro de apertura mediante dispositivos.
Si quieres saber cuales son los dispositivos de control de accesos más cómodos y recomendables para proteger tu Comunidad de Propietarios no dudes en contactarnos, y uno de nuestros asesores expertos en seguridad os ayudará a tomar la mejor decisión.